En los últimos tiempos, los CRM inmobiliarios se han convertido en una herramienta de trabajo imprescindible para las agencias. ¿Por qué? ¿Qué los hace tan deseables? Este artículo pretende ser una guía básica para principiantes donde se explica en qué consisten, cuáles son sus ventajas y los diferentes tipos que existen.
CRM inmobiliario: una herramienta de gestión eficaz
Las siglas CRM hacen referencia a la expresión inglesa Customer Relationship Management, es decir, gestión de las relaciones con los clientes. Un CRM inmobiliario es una herramienta informática destinada a administrar toda la información que se genera desde el primer contacto con un cliente. E implícitamente, también es un modo de relacionarse con él.
En el día a día, una agencia inmobiliaria genera mucha información, que es necesario administrar debidamente. Hay que subir la cartera de inmuebles a los portales especializados. También hay que alimentar las fichas de los clientes con información relevante obtenida a partir de conversaciones y acciones llevadas a cabo con ellos. Y, por supuesto, hay que hacer un seguimiento de las tareas que realiza cada agente: visitas, captación de clientes, venta de propiedades.
Los CRM inmobiliarios permiten ejecutar estas tareas con agilidad, lo que redunda en una mejora de la productividad. Es cierto que lleva un tiempo alimentar la base de datos del sistema y aprender a usar las herramientas disponibles. Pero, una vez superados estas dificultades iniciales, los beneficios son evidentes.
Ventajas de implementar un CRM específico para inmobiliarias
- Permite registrar todas las comunicaciones en una misma plataforma, desde el primer contacto hasta la venta de las propiedades.
- Permite construir perfiles de los clientes y relacionarlos con los inmuebles disponibles.
- Permite el envío de notificaciones y repuestas automatizadas.
- Permite el acceso de los agentes a datos actualizados cuando están fuera de la agencia.
- Permite elaborar informes, formularios y cuestionarios para fidelizar a los clientes.
Tipos de CRM inmobiliarios
Básicamente, se puede hablar de dos tipos de CRM para inmobiliarias. Por un lado están los programas instalados en ordenadores personales o portátiles. Las actualizaciones y la seguridad del software están a cargo de la inmobiliaria, o bien se pueden contratar con el desarrollador como un servicio adicional. Su principal desventaja es que ocupan espacio en el ordenador.
El segundo tipo es el que está en la nube. Se accede a él desde cualquier dispositivo con conexión a internet y es compatible con el uso de dispositivos móviles. No se requiere instalación y el proveedor se ocupa de la seguridad y el mantenimiento. El pago es por uso.
De todas formas, estos dos tipos de CRM no son excluyentes. Cada vez más proveedores ofrecen la posibilidad de compatibilizar versiones de escritorio y en la nube, con características específicas para cada uso y usuario. Antes de decidir qué forma de acceso es la más adecuada, es imprescindible contar con el asesoramiento de proveedores especializados en el sector. Un ejemplo: la CRM de Unlatch está desarrollada por una empresa que da servicio tanto a promotores como a comercializadores. Por lo tanto, conoce las necesidades de ambos y está en disposición de favorecer las relaciones entre ellos y de estos con sus clientes. Este tipo de sinergias es muy beneficioso para mejorar los procesos y adaptarlos a la estructura y volumen de ventas de cada inmobiliaria.
En resumen, los CRM inmobiliarios son mucho más que una plataforma donde el cliente y la agencia pueden comunicarse. Al estar alimentados con una base de datos personalizada, permiten que la gestión de la venta de propiedades sea más ágil y productiva.